Estaba en la Rambla de Capuchinos 36-38 (actual Ramblas 31). Fue el primer local construido por la familia Belio García. El origen del local, se remonta a unas barracas instaladas en 1892, en la explanada que había en la Puerta de la Paz frente al Parque de Ingenieros, (actual edificio del Gobierno Militar), conocido con el nombre de Museo de Figuras de Cera.

 

UNA BARRACA CINEMATOGRÁFICA

Con la llegada del cine en 1896, un año después, los hermanos Belio, iniciaron sesiones cinematográficas en el local, con sesiones de media hora, proyectando las primeras películas Lumière. El 15 de junio de 1898 a las tres menos cuarto de la madrugada según el Diario de Barcelona, se declaró un incendio que quemó toda la barraca donde se exhibian también figuras de cera.

En el local se encontraba un órgano valorado en 30.000 pesetas, Solo se salvaron 36 sillas del conjunto de mobiliario que existía y algunas ventanas de madera y parte del asta de la bandera del Parque de Ingenieros.

En el incendio, el encargado del local, Martin del Olmo, sufrió quemaduras de primer grado por las que fue ingresado en el Hospital. El barracón propiedad de los hermanos Mariano y Manuel Belio García, que no estaba asegurado, les hizo perder todo el valor del proyecto.

Los periódicos comentaron la noticia y de la negligencia por parte de las autoridades, de permitir la instalación y el funcionamiento de estos locales.

La Publicidad (periódico de la época), advertía a las autoridades municipales que el incendio, debía servir de aviso a la hora de conceder autorización para espectáculos públicos en locales que no reunían las mínimas condiciones exigidas por la ley.

Precisamente frente al barracón incendiado se había instalado el Cinematógrafo Colon, que también estaba construido de madera y tela y que tenía una sola puerta de (entrada y salida), algo que representaba un auténtico peligro, caso de que se produjera un incendio en el momento de las funciones.

La pérdida del barracón y la reciente llegada del cine, cambio los planes de los hermanos Belio que decidieron dar un cambio a la exposición de las figuras de Cera, por la cinematografía, alquilaron el Cinematógrafo Colon (en el Teatro Principal) y compraron dos proyectores Lumière, Tipo «A» y «B», convirtiéndose en empresarios cinematográficos.

NUEVO LOCAL EN LA RAMBLA

En 1903, alquilaron un local en la antigua Rambla de Capuchinos, donde instalaron el primer Belio-Graff. El local era amplio con un gran Lienzo (pantalla) rodeado de motivos florales y un piano vertical debajo de la pantalla.

El espacio reservado para el público estaba dividido en dos zonas: la delantera cercana a la pantalla, era la general tenía una mayor capacidad y la trasera estaba considerada como zona preferente.

La inauguración del local, tuvo varios retrasos a causa de los problemas administrativos, que tuvieron que sufrir a causa de que la familia Viada Llanzá, propietaria del edificio, no les permitía instalar los rótulos y los adornos en la entrada del local.

La necesidad en conseguir la autorización y la obstinación de los propietarios, les obligó a escribir al alcalde para que les autorizase la colocación de los letreros. A tenor de la terquedad de ambas partes por la colocación de los anuncios, el cine no pudo inaugurarse hasta el día 6 de abril de 1904. La Publicidad y La Veu de Catalunya, publicaban el siguiente anuncio:

Cinematógrafo Belio Graff, junto al Lyon d’Or. El mejor y más elegante de Barcelona. Cambio depelículas todas las semanas y además conciertos con el magnífico Orchestrion, único en España. Las sesiones cinematográficas y audiciones musicales se verifican consecutivamente cada 30 minutos. Entrada general 25 céntimos, preferencia 50 céntimos

En enero de 1907 presentó el aparato de proyección marca “Elgephone”, que disponía de un amplificador de sonido mediante el aire comprimido.

El 20 de mayo de 1911, se estrenó la película Sixto V, que supuso para los hermanos el fin como empresarios cinematográficos.

La película al principio, represento un grandioso éxito de público, pero aunque había sido autorizada por la Santa Sede, tocaba temas que no fueron bien vistos por los grupos religiosos del momento, que provocaron serios altercados, que desembocaron en el cierre de los dos cines.

Las escuadras del Comité de Defensa Social (fundadas el día 21 de marzo de 1903), con sede en la calle Canuda 31, capitaneadas por Dalmacio Figueras (apodado el «Fiero Paladín de la Defensa Social»; asaltaron el cine Belio-Graff de la Rambla del Centro.

Penetraron en todos los departamentos del local, destrozando parte de la sala los aparatos de proyección y el mobiliario, realizando serias amenazas a la familia Belio, si continuaban manteniendo en cartel la proyección de la película, pese haber sido autorizada por la censura.

Manuel Portela Valladares gobernador civil, obligo a que Millán Astray, jefe superior de policía de Barcelona, (que apoyaba los actos de persuasión de dicho grupo), mandara suspender el acoso y detener a muchos de sus correligionarios ultraconservadores, autores de los actos vandálicos.

En 1913, Mariano Belio, cansado de los continuos problemas y las amenazas veladas, decidió traspasar el local al empresario cinematógrafo José Cirera, que lo convirtió en el cine Príncipe Alfonso (que en 1931 y hasta 1937 se llamará Cine Ramblas).

 

ULTIMAS SESIONES EN 1913

La últimas películas proyectadas por el cine Belio-Graff, tuvieron lugar el lunes 5 de mayo de 1913, con los estrenos de “La criolla” de 900 metros, “Diamante fatal” 1.000 metros,”La agencia Griffart” 900 metros y las reposiciones “Moros y perros”, “Las apariencias engañan”, “Una vida por otra” y “El retrato de Bebé, anunciando para fecha próxima “La tela de araña” de 800 metros.

Al día siguiente en las carteleras de los periódicos y en la fachada del local aparecía «Príncipe Alfonso», el nuevo nombre del cine, anunciando el estreno de “Una mujer terrible” y las reposiciones de las películas estrenadas el día anterior.


Cinematógrafo Belio-Graff 
junto al Lyon de Oro. El mejor y más elegante de Barcelona.

Cambio de películas todas las semanas y además conciertos con el magnífico Orchestrion, único en España.

Las sesiones cinematográficas y audiciones musicales se verifican consecutivamente cada 30 minutos.

Entrada general 25 céntimos. Entrada preferencia 50 céntimos.


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Si te interesa la historia de Barcelona no dudes en consultar algunas páginas de referencia:

EL BELIO-GRAFF DE LAS RAMBLAS 1897-1913

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