1818 UNA FUENTE EN EL PLA DE LES COMÈDIES
La primitiva Fuente del Viejo se construyó en 1818 en una plaza que se había formado frente a la puerta Trentaclaus, también conocida como Portal dels Ollers, debido a la presencia de numerosos alfareros que vendían ollas, escudillas y vasijas en la zona.
Fue bautizada por los ciudadanos como «Pla de las Comèdies», por estar situada frente al edificio del Teatro Principal. El ayuntamiento, por su parte, la bautizó oficialmente como plaza del Teatro. Actualmente, en el lugar se puede ver un fragmento de la muralla asociado al antiguo Portal de Trentaclaus.
ANTECEDENTE: LA FUENTE DEL SATIRO
La Fuente del Viejo no fue la primera fuente monumento de la zona. Anteriormente, entre 1802 y 1817, se construyó una fuente conocida popularmente como La Fuente del Sátiro, un abrevadero decorado con la figura de un fauno con una jarra en la mano, realizado en yeso.
De la Fuente del Sátiro solo se sabe que las autoridades decidieron retirarla y en su lugar apostaron por poner otra fuente que tuviera un poco más de categoría como un lugar de encuentro para los viandantes. En un principio pensaron en colocar una estatua, pero finalmente optaron por un proyecto más ambicioso. Las autoridades contactaron con el arquitecto Pere Serra i Bosch, que presentó un proyecto mucho más ambicioso que el inicial.
En aquellos tiempos, los consistorios tenían problemas para aprobar proyectos debido a la gran cantidad de partidos políticos. Los proyectos eran a menudo modificados por la oposición, lo que dificultaba su ejecución.
DEDICADO A LAS AGUAS QUE REGABAN BARCELONA
El boceto del artista representaba los principales suministros de agua para la ciudad. Las cuatro esculturas simbolizaban las aguas del Llobregat, el Canal de Urgell, la acequia Condal y Puerto.
La obra fue realizada por los escultores Damià Campeny y Salvador Gurri. El pedestal, en forma de pirámide truncada, servía como base para los chorros de agua. En el centro del pedestal se colocó una escultura de la diosa romana Minerva, obra de Gurri.
En la base del pedestal, cuatro hornacinas albergaban figuras alegóricas. Una de estas figuras era la de un anciano con barba, semidesnudo, apoyado sobre unas rocas con una cornucopia en la mano derecha y una jarra en la mano izquierda, de la que caía agua.
Este fue el origen del nombre popular que la ciudadanía dedicó a la fuente, que era apodada «la Font del Vell» por la figura del anciano que se encontraba en una de las hornacinas. La fuente fue inaugurada en 1818.
La zona en aquellos tiempos estaba frecuentada por personas de mala reputación que aprovechaban la poca luz que había por las noches para hacer sus necesidades. Esto fue motivo para que el ayuntamiento derribara la fuente y construyera unos lavabos públicos subterráneos en su lugar.
MINERVA Y EL VIEJO REUBICADAS
Las figuras de Minerva y del Viejo fueron las únicas que se conservaron de la fuente. La figura de Minerva esculpida por Gurri, se colocó temporalmente en el Parque de la Ciudadela, pasando después frente al Museo Marítimo, y finalmente se conserva en un almacén municipal de Nou Barris.
La figura del Viejo, realizada por Damià Campeny, también se colocó en el Parque de la Ciudadela, hasta que el 1 de febrero de 1975 se trasladó definitivamente a la plaza de Sants, donde se colocó sobre un pequeño pedestal.
En uno de estos traslados, la figura del Viejo recibió un golpe que le hizo perder parte de la nariz.
Esto dio lugar a que la imaginación popular volviera a actuar, convirtiendo la Font del Vell en la Font del Xato.
Hoy en día, la plaza donde se encontraba la fuente ha desaparecido, ya que ha sido anexionada a las Ramblas. En su lugar, se encuentra un monumento dedicado a “Pitarra” inaugurado en 1907.
DISCREPANCIAS SOBRE LA ALEGORÍA A LAS AGUAS
Los estudiosos discrepan sobre la adjudicación de una de las estatuas al Canal de Urgell. En primer lugar, porque el agua del canal no llegaba a la ciudad en el momento de la construcción de la fuente. En segundo lugar, porque la construcción del canal tuvo lugar a partir de la formación de la compañía del Canal de Urgel S. A., según un título de acciones del 2 de febrero de 1854.
EL CANAL DE URGELL
Los primeros estudios serios para la construcción del Canal de Urgell fueron ordenados por Carlos I en 1506 y Felipe II en 1554, 1574 y 1577. Sin embargo, las obras no prosperaron por diferentes motivos.
Ignacio Girona i Targa y los Hermanos Clavé y Cía., que poseían una especie de banco, tomaron las riendas del proyecto. Compraron muchas tierras en la zona, formando la finca del Castell del Remei. El 3 de noviembre de 1852, el gobierno central otorgó la concesión de las obras del Canal de Urgell a la Sociedad Anónima Canal de Urgell. Esta sociedad se formó el 28 de diciembre de 1852.
Es posible que, en el momento de la construcción de la fuente, los responsables del proyecto ya estuvieran al tanto de la creación del canal. Por ello, decidieron incluir una figura alegórica del canal en la fuente, como símbolo de la importancia que este tendría para la ciudad.
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