En 1750, abrió sus puertas en la Plaza del Teatro 2 uno de los primeros cafés de Barcelona, el café Caponata propiedad del empresario italiano Andrea Caponata. Estaba situado en los bajos ala derecha del edificio del desaparecido teatro Principal Palace.
Pronto acaparo la visita de intelectuales que se reunían para comentar la actualidad política del momento. Sus tertulias hicieron que Ramón de la Cruz, escritor madrileño que se encontraba en Barcelona, tomara al local como protagonista principal de su libro «El café de Barcelona» (1788). Posteriormente se convirtió en Café de las Delicias.
1891 NACE EL CAFE RESTAURANTE AU LYON D´OR
En 1891, Enric Vilalta y Sebastià Gay, empresarios pertenecientes al ramo de la restauración, adquirieron el local para convertirlo en El Café-Restaurante-Cervecería “Au Lyon d’Or”. Vilarta y Gay mandaron construir un local de lujo en estilo modernista.
Forraron las paredes con seda roja y convirtieron la antigua columna central de la sala, en una columna salomónica y mandaron construir una chimenea artística, al escultor Enric Clarasó.
Se colocaron tapices flamencos, porcelanas de Talavera, alcuzas rarísimas, lámparas, armaduras y cornucopias. En la entrada a modo de presentación y saludo recibía a los clientes un atril de hierro forjado con el nombre del café en francés: “Au Lion d’Or”.
La puerta de entrada tenía las vidrieras de colores y al traspasarla te encontrabas con una sala original que te transportaba a una cervecería alemana del siglo XVI.
La Vanguardia del día 13 en la cuarta columna de la página 2, hacia un glosario exhaustivo de los pormenores del local.
Vilarta y Gay, contrataron a Paco Coll i León, para que dirigiera la cocina del restaurante. Coll un chef de ideas recurrentes, preparó para la noche de la inauguración el 11 de marzo de 1891, a un camarero para que recorriera las calles del centro con un carro tirado por caballos que llevaría una bandeja con un Rosbif tapado por una campana enorme al recién estrenado restaurante.
AMPLIADO EN 1892
El éxito del restaurante y los buenos resultados hicieron que Enric Vilalta, un año después, decidiera ampliar el local que pasó a disponer de tres salones, reabriéndose mejorado el 29 de octubre de 1892.
El local empezó a tener sus propias tertulias ya que en aquellos tiempos la zona era muy concurrida por artistas y escritores que buscaban un lugar acogedor para sus reuniones. Dicen que Santiago Rusiñol escribió en una de sus mesas la obra “La Bona Gent”, otro de los artistas que frecuento el local fue la cupletista Consuelo Portella más conocida por “La Bella Chelito”.
1915 NUEVA RERFORMA
El auge del local provoco que en 1915 se hiciera una reforma para adaptar un salón para bailar tangos. Pero los cambios no paraban, en 1919, Francisco Maestre Laborde, “Conde de Salvatierra”, decretó que el “Au Lyon d’Or” y otros veinticuatro locales similares pudiera adaptar sus locales para que se pudiera permitirse el juego.
NUEVA AMPLIACIÓN EN LOS AÑOS TREINTA
En la década de los treinta, sus propietarios decidieron ampliar el negocio y acondicionaros el sótano del edificio para abrir un nuevo local conocido en aquellas fechas como «Nidos de Arte», al que se acercaban jóvenes con afán de proyectarse y viejos que después de su retirada buscaban un local para poder volver a actuar. Estos locales concurridos por bohemios rapsodas, cantantes, bailarines, esperaban que algún mecenas los sacara del anonimato. Conocido como “La Rata Morta”, los promocionaba con el lema «Música, canto y declamación”.
Durante el periodo de la guerra civil a finales de 1936, tuvo dos hechos que le volvieron a ser noticia. El 7 de diciembre de 1936, cuando Ramón Berguñó Balcells, «Pencas», antiguo camarero del local, murió asesinado por el hecho de pertenecer al Sindicato Libre. El otro hecho fue que en su local se celebró el día 22, un sorteo especial de Navidad.
TRAS LA GUERRA: EL LEON DE ORO
Finalizada la guerra civil, el restaurante para abrir debió cambiar su nombre y convertirse en el “El León de Oro”, nombre que conservo hasta el final de sus días.
La postguerra aparte del cambio de algunos nombres, también provocó el cese de las tertulias en las cafeterías. Los tertulianos empezaban a hablar de sus aficiones y acababan hablando de política (cosa que no gustaba al nuevo régimen). Eran vigilados por miembros de la policía secreta, que provocaban detenciones posteriores. Con el cese de las tertulias y la situación económica el local empezó un lento declive que acabo con su cierre.
PANAM´S
El cese del negocio del local coincidió con el tiempo que el régimen de Franco empezó a tener contactos más oficiales con los norteamericanos, los cuales tomaron el puerto de Barcelona como una base en la que aparecían continuamente, era raro que en el puerto no hubiera atracado un navío de dicho país, por lo que alguien aprovecho el cierre del “León de Oro”, para abrir un local que pronto se hizo un sitio en la noche barcelonesa, este no fue otro que el famoso Cabaret “Panam’s”.
