1952 NACE EL DIARIO «DICEN»
El 13 de septiembre de 1952, Barcelona vio nacer Dicen, un periódico deportivo que se gestó como revista semanal. Sus fundadores, Federico Pastor, Francisco Albiach y José Antonio Caro, se dieron cuenta del auge del fútbol y crearon Ediciones Rápidas SA (ERSA) para publicar información sensata y alejada de las emociones del momento.
Los primeros números de Dicen enfrentaron dificultades. Con 20 páginas y un precio de 3 pesetas, la revista no alcanzaba el éxito esperado. La empresa replanteó la estrategia y a partir del número 6, Dicen se redujo a 12 páginas y un precio más accesible de 1,30 pesetas.
Dicen se publicaba los jueves por la tarde, compitiendo con los diarios vespertinos El Noticiero Universal y La Prensa, que aparecían diariamente en Barcelona.
LIDER EDITORIAL
Para dirigir la publicación, se contrató al prestigioso periodista Julián Mir Vicente. Su experiencia en la sección de deportes de La Prensa como caricaturista y su visión periodística fueron claves para el éxito de Dicen.
Mir Vicente dirigió el rotativo desde su fundación en 1952 hasta 1975, y posteriormente tuvo una segunda etapa entre 1977 y 1981. Su larga trayectoria en Dicen lo consolidó como una figura emblemática del periodismo deportivo español.
1980 COLABORACION CON MUNDO DEPORTIVO
En la década de 1980, Mir Vicente colaboró con Mundo Deportivo, el primer semanario deportivo publicado en España (1906) y el segundo europeo después de La Gazzetta dello Sport (1896). Su participación en este diario consolidó su legado como un referente en el periodismo deportivo.
En 1991, Julián Mir recibió la medalla «Forjadores de la Historia Deportiva de Catalunya» en reconocimiento a su extensa y fructífera carrera en el ámbito de la información deportiva.
Los fundadores de Dicen, antes de embarcarse en este proyecto, habían creado el marcador simultáneo Dardo. Este sistema de información, pionero en su época, reflejaba los resultados de los partidos en tiempo real, una herramienta invaluable en una época sin internet ni teléfonos móviles.
Para obtener los resultados de los partidos que se celebraban en otras ciudades, el equipo de Dicen se basaba en la información proporcionada por otro partido que se celebraba simultáneamente. Un sistema ingenioso que demuestra la capacidad de adaptación y la pasión por el deporte de sus creadores.
DE SEMANARIO A DIARIO
El éxito del semanario Dicen fue tal que sus editores decidieron convertirlo en diario. El 4 de febrero de 1965 nació el «Primer diario deportivo de la tarde», con la particularidad de incluir tres puntos suspensivos en su cabecera: Dicen….
Ese día, el diario La Vanguardia publicó un anuncio a dos columnas en su página 13 para dar a conocer el nacimiento del nuevo diario deportivo vespertino Dicen. Esta decisión se tomó debido a que ya existían diarios deportivos matutinos en Madrid y Barcelona, como Marca y El Mundo Deportivo, respectivamente.
Dicen nació en un contexto político complejo, la dictadura franquista. En Barcelona, ya existía el diario deportivo El Mundo Deportivo, que se publicaba por las mañanas. En Madrid, el diario Marca, nacido en San Sebastián y controlado por la Delegación Nacional de Prensa y Propaganda del régimen, dominaba el panorama informativo deportivo.
A pesar de las dificultades, Dicen se propuso ofrecer una alternativa informativa a los lectores de Barcelona. Su enfoque independiente, su estilo sensato y su apuesta por la información veraz le permitieron ganarse un lugar en el mercado y convertirse en un referente del periodismo deportivo español.
Dicen llegó al mercado con la intención de ofrecer una alternativa a los lectores que buscaban un enfoque distinto al de los diarios matutinos. Su objetivo era brindar una opinión neutral sobre el deporte, algo especialmente difícil en la época de la dictadura franquista.
Desde sus inicios contó con una redacción y rotativa propia ubicada en los locales del Diario de Barcelona. En ese momento, Diario de Barcelona imprimía una tirada de 30.000 ejemplares, mientras que Dicen rápidamente alcanzó una tirada diaria de 100.000 ejemplares.
Se distribuía principalmente en Barcelona, pero también llegaba a muchos pueblos de la provincia a través de los coches de línea, un medio de transporte popular en la época. No solo se destacaba por su enfoque informativo independiente, sino también por su apuesta por la innovación. En este sentido, Dardo, el Marcador Simultáneo, marcó un hito en la forma de seguir los partidos de fútbol en una época sin las tecnologías actuales.
EL SISTENA DARDO
Este sistema, ideado por los fundadores de Dicen…, se basaba en la publicidad. En los laterales de las porterías de los campos de fútbol se instalaban marcadores que, mediante la alternancia de marcas publicitarias, indicaban los resultados de los partidos que se estaban disputando en ese momento.
Un operador, ubicado en cada campo, recibía los resultados por teléfono y los actualizaba instantáneamente en el marcador. Este sistema era sencillo, eficaz y de bajo mantenimiento, ya que las empresas anunciantes se encargaban de los costes.
Dardo no solo informaba del marcador, sino que también utilizaba tarjetas para comunicar incidencias del partido, como goles, tarjetas amarillas o rojas, expulsiones, etc. Fue un símbolo de una época en la que las comunicaciones eran limitadas. Su ingenio y simplicidad permitieron a los aficionados seguir la emoción del fútbol en directo, sin importar la distancia.
En 1975, Dicen… fue adquirido por el Grupo Godó, lo que supuso un cambio en su dirección y producción. En 1983, Ediciones Rápidas SA (ERSA), la empresa editora del diario, se liquidó, y en 1985, tras pasar por diferentes propietarios, Dicen… finalmente cerró sus puertas.
A pesar de su desaparición, Dicen… sigue vivo en la memoria de aquellos que tuvieron la fortuna de disfrutarlo. Su legado, marcado por la innovación, la independencia y la pasión por el deporte, sigue inspirando a las nuevas generaciones de periodistas y aficionados.
2010 INTENTO FALLIDO DE RELANZAMIENTO
En 2010, con motivo de las elecciones a la presidencia del FC Barcelona, se realizó un intento de relanzar el diario, pero este no tuvo éxito. Dicen… quedó como un recuerdo imborrable de una época dorada del periodismo deportivo español.
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