El desaparecido Pabellón de Higiene del Puerto, fue un edificio construido a principios del Siglo XX en una isleta central en el Paseo de Colón. Estaba delante de los almacenes de aduanas, frente al desaparecido muelle del Carbón y muelle de San Bertrán por el lado mar y a la calle Carrera con el complejo de la central eléctrica de las tres chimeneas del Paralelo.
INAUGURADO EN 1909
Fue un edificio de ladrillo construido por la Junta del Puerto. Fue inaugurado en 1909, única y exclusivamente para ser utilizado por los trabajadores dedicados a la carga y descarga del por aquel entonces imprescindible y en la actualidad vilipendiado carbón.
El motivo de su construcción no era otro que concentrar en la entrada del puerto, un lugar que reuniera todas las condiciones necesarias para que los trabajadores portuarios, tuvieran la sanidad e higiene tan necesaria debido al trabajo que realizaban.
Aquellos descargadores que después de tantas horas moviendo toneladas de carbón, no tuvieran que volver a casa al final de la jornada, sin un lugar donde asearse y cambiarse de Ropa.
Otro de los motivos para la construcción del edificio, era la de tener una ubicación cercana para poder atenderles rápidamente, después de los accidentes que se producían diariamente que obligaba a realizar traslados urgentes en malas condicione si los centros hospitalarios, en una situación nada higiénica ni para ellos ni tampoco para los lugares y lo sanitarios que debían atenderles.
El edificio del Pabellón de Higiene, incorporaba una serie de apartados que estaban acondicionados con una batería de lavabos, duchas, servicios y guardarropía para cambiarse al terminar la jornada.
En otro departamento estaban instalados servicios de medicina y enfermería para una atención inmediata en caso de urgencia.
Posteriormente en el extremo situado frente a los almacenes de aduanas se construyó un elemento en el que destacaba en la parte baja una fuente con la figura de pez, en el centro un plafón con una figura que soportaba un reloj a dos caras y la parte superior rematada por una cúpula negra que sostenía una armazón metálico con un pararrayos y en el interior del armazón una campana.
Los bombardeos sufridos durante el periodo de la guerra civil, fueron causa de unos daños irreversibles que provocaron su derribo total a su finalización.
En la actualidad su posición correspondería con la rotonda de salida del cinturón de Ronda del principio de la avinguda del Paral-lel.
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